Como amantes de los muebles que somos, te traemos una serie de útiles consejos para el cuidado y limpieza de los muebles de tu hogar. El mantenimiento y cuidado de nuestros muebles resulta crucial para alargar su vida útil. En este artículo te explicamos qué puedes hacer para mimar tus muebles y que luzcan como el primer día. ¡Comenzamos!
Con invertir apenas un par de horas semanales a nuestros muebles podemos alargar su vida útil considerablemente. Es habitual realizar una limpieza superficial de manera rápida para retirar el polvo, pero con eso no es suficiente. Por eso, te traemos estos consejos para el cuidado y limpieza de los muebles de casa.
Cuidado y limpieza de los muebles en general
Aunque vamos a abordar cada tipo de material del mueble de manera independientemente, hay puntos en común entre los distintos tipos de mueble de madera.
- Cuidado con la humedad ambiental. Un ambiente muy seco puede afectar a la madera de los muebles. Evita ponerlos cerca de radiadores y estufas. Y si fuera necesario, piensa en recurrir al uso de humidificadores. Por el contrario, si el ambiente es demasiado húmedo, el resultado puede ser nefasto. Es conveniente conocer la humedad óptima para el cuidado de tus muebles.
- Limpia en el mismo sentido de la veta. Cuando limpies madera natural es conveniente respetar la dirección en la que limpias la superficie del mueble. Sigue siempre el sentido de la veta para evitar estropear el dibujo.
- Evita la luz solar directa. La madera es muy susceptible a la luz del sol. Es por eso que es conveniente evitar la luz directa para que la madera no pierda color.
- Usa posa-vasos y cobertores. Tanto el calor de los vasos con bebidas calientes, como el agua de jarras y jarrones que podamos posar sobre la madera pueden dañarla. Usa siempre que sea posible posa-vasos, cobertores o protectores para tus muebles.
Cuidado y limpieza de los muebles según el material del mueble
Cuidados y limpieza de los muebles lacados y pintados
Es habitual encontrar este tipo de acabado en mesas y muebles de salón. Para limpiar este tipo de muebles es recomendable evitar esponjas o trapos que puedan rallar el mueble. Hazte con un paño de microfibras o algodón y humedecelo con agua. Es recomendable no usar productos abrasivos con alcohol o disolventes que puedan desgastar la laca. Una vez limpio puedes secarlo con suaves movimientos circulares de otro paño de microfibra.
Este tipo de muebles es muy susceptible a los efectos dañinos del calor y las ralladuras. Evita posar bebidas calientes o elementos que puedan arañar la superficie.
En caso de encontrarte con una mancha resistente al tratamiento básico para muebles lacados, siempre puedes recurrir a productos de limpieza específicos para este tipo de mueble.
Cuidados y limpieza de los muebles de madera barnizados y de chapa
Como en el caso de los muebles lacados, debemos extremar la precaución para no dañar el barniz superficial. Es por ello que debemos recurrir a un procedimiento similar al anterior. Evita los disolventes y demás productos agresivos que puedan desgastar el barnizado.Intenta evitar siempre los productos abrasivos que contengan silicona, disolventes, quitaesmalte y otros productos agresivos.
Cuando encuentres una mancha difícil de eliminar, puedes usar una bayeta humedecida en agua templada o incluso añadir un poco de jabón neutro.
Especial mención para los muebles de madera de este tipo situados en cocinas. Éstos tienden a acumular grasa y restos de comida, por lo que requieren de una limpieza muy regular a fin de evitar acumulaciones de grasa excesivas que requieran de productos algo agresivos.
Si quieres evitar el uso de éstos últimos, prueba a añadir algo de vinagre a la solución acuosa para limpiar. El vinagre disolverá en gran medida la grasa y los restos orgánicos facilitándote la tarea.
Cuidados y limpieza de los muebles de melamina
Este tipo de mueble soporta algo mejor los químicos que los anteriores, pero no es conveniente abusar de ellos. Productos como los limpia-cristales y algunos limpia-maderas te serán útiles para este tipo de superficie. Este acabado es especialmente sensible a la luz solar, por lo que es aconsejable evitar la exposición directa a ésta.
También es recomendable evitar el uso de ceras que puedan engrasar el mueble. Ten especial cuidado con el sol. Si les da la luz del sol directa, puede que el mueble se deteriore.
Cuidados y limpieza de los muebles de hierro y otros materiales
Los muebles de hierro, antaño utilizados sobre todo en exteriores, han ganado enteros como mueble de interior. Este tipo de mueble es muy resistente, pero no está exento de cuidados. Procura retirar el polvo con un paño o un cepillo y una bayeta de microfibra.
Existen numerosos trucos naturales para limpiar manchas de óxido de los elementos de forja, como el aceite de oliva con nafta, el agua con vinagre o limón, y muchos otros, pero más vale prevenir que curar. Una limpieza periódica evitará que el mueble se deteriore con este tipo de agentes corrosivos. Si es demasiado tarde para una limpieza superficial, puede que tengas que recurrir a estropajos y otras herramientas que pueden rallar la superficie del mueble. Es por ello, que no podemos descuidar el cuidado de este tipo de muebles, por resistentes que parezcan.
Cuidados y limpieza de los muebles de plástico o PVC
Por lo general se usan en exteriores , jardines y terrazas. Los muebles de plástico o resina sintética pueden contar con superficies y texturas muy variadas. Por eso procederemos a retirar en seco el polvo acumulado usando un trapo para las superficies lisas, o un cepillo de cerdas suaves para las zonas de fibras entrelazadas. Evita el uso de trapos húmedos que puedan generar masas que rallen la superficie.
Aunque puedan parecer resistentes a productos químicos agresivos, es conveniente evitar el uso de acetonas o lejías. Para evitar daños superficiales o deterioro alguno de su color puedes usar agua con jabón. La solución jabonosa disolverá la suciedad sin dañar en absoluto el mueble.
Para muebles de exterior que hayan de soportar las inclemencias del tiempo existen en el mercado aerosoles y ceras protectoras.
Cuidados y limpieza de los muebles de mimbre, ratán u otras fibras naturales
Este tipo de mueble tiende a acumular gran cantidad de suciedad entre sus fibras.Es por ello que deberemos llevar a cabo su limpieza con cierta frecuencia. Puedes valerte de plumeros, cepillos o aspiradoras con cabezales adaptables para evitar dañarlos.
En el caso de entramados compactos, bastará con hacer aplicar un paño húmedo con una solución jabonosa a favor del sentido de la trama. No te olvides de secar lo antes posible para evitar la creación de mohos y humedades que puedan dañar el mueble.
A los muebles de este tipo se les puede aplicar cera en spray para lograr mantener su brillo por más tiempo.
Cuidados y limpieza de los muebles de cuero
Los muebles de cuero son especialmente sensibles a la luz solar y al calor de radiadores y estufas. Evita la exposición al calor para reducir la aparición de grietas. La sequedad es quizá el mayor enemigo del cuero, es por ello que éste debe hidratarse con aceites, ceras o grasas especificas.
Evita limpiar el cuero con productos abrasivos como disolventes o alcohol porque es muy fácil deteriorarlo. El cuidado de los muebles de cuero requiere productos destinados a este material en concreto. Si encuentras una mancha leve en su superficie, puedes probar a tratarlo con una solución de agua y cerveza. Si la mancha no es reciente, es probable que tengas que recurrir a algún producto específico.
Conclusión
Cada tipo de material es distinto y requiere un cuidado y limpieza muy concreto. Te aconsejamos no descuidar el mantenimiento periódico de tus muebles. A poco tiempo que les dediquemos lograremos resultados sorprendentes.
Desde AlconMobiliario te recordamos que si tienes cualquier duda sobre el cuidado y limpieza de tus muebles, siempre estamos a tu entera disposición. ¡Te esperamos!
